Booking.com
Booking.com
Lugares Turísticos » Europa » Me enamore de Zurich

Me enamore de Zurich

Ir de vacaciones a Suiza es un lujo que hoy en día podemos permitirnos. Además en cualquier época del año, este país lleno de paisajes incomparables resulta ser magnifico y nos ofrecerá una infinidad de maravillas naturales, culturales y artísticas que no podremos olvidar. De hecho, son muchos los turistas que deciden conocerla a lo largo de todo el año, y todas las opiniones resultan ser positivas y favorables en todos los aspectos.

Si además decidimos conocer en persona su capital, Zúrich, hallaremos en ella todo el lujo y la elegancia, así como el bienestar y la tranquilidad por la que este país europeo es conocido mundialmente.

Su calidad de vida, así como los muchos lugares que valen la pena conocer, son los ingredientes necesarios e indispensables para pasar unas vacaciones inolvidables tanto si decidimos hacerlas en pareja, como si finalmente lo hacemos con toda la familia. Los monumentos históricos y emblemáticos de la ciudad, empiezan desde la Iglesia de Grossmünster, que deja impresionados a todos los que la ven por primera vez, pues sus campanarios gemelos y su estilo románico con toques góticos ya nos ofrecen un paisaje increíble, pero desde dentro, las vistas panorámicas a la ciudad dejan sin aliento.

Otro de los lugares que no hay que dejar de visitar es el Jardín Botánico de Zúrich, que con sus más de cinco hectáreas nos brinda la posibilidad de dar largos y tranquilos paseos entre una naturaleza desbordante y alejándonos del ruido y el bullicio del centro de la ciudad.

Si además nos gustan los paisajes naturales, entonces admirar el Lago Zúrich es el sitio ideal para ello, y teniendo en cuenta la cantidad de alternativas de ocio y turísticas que nos ofrece, es un lugar que hemos de conocer en persona y gozar al máximo durante nuestra visita a Suiza.

También encontraremos otros rincones emblemáticos por toda la ciudad que nos dejarán maravillados, como pueden ser la ópera de la ciudad y la galería de arte. Pero si tenemos tiempo, acercarnos al punto más alto de la ciudad, el Uetliberg, nos dará la oportunidad de admirar a lo grande tanto la ciudad, como su lago y los Alpes.